14 de julio de 2006

O un Abrazo Tal Vez?


Que difícil es pensar en un regalo, sobre todo cuando tienes ganas de regalar todo, y si logras dar con el correcto, se hace todo más difícil porque no está en ninguna parte.

Mi búsqueda de algún regalo empezó dividiendo por materias lo que pudiera gustarle y me reduje a: música, libros, películas, comida o ropa. Algo amplio, pero mas encima había que pensar en algo que no le fueran a regalar los amigos también.

Pensé en el último disco de Los Tres, pero es obvio que alguno de sus amigotes se pronunciará, tal vez el último de Julieta Venegas, pero desistí, ni siquiera ha escuchado todos los discos que se compró en Buenos Aires. Lo mismo me pasó con los libros, estuve empecinada con el “libro de los amores ridículos” de Kundera, que es uno de los mas hilarantes que he leído en el último tiempo, pero no me decidí. Se pasearon por mi cabeza muchas películas, Alta Fidelidad, algunas francesa que me recomendaron, Emmanuelle, pero tampoco logré enganchar con ninguna, tenemos tantas por ver que podría sonar a un regalo más....y quiero algo especial.

Lo de la ropa es algo más difícil, vi poleritas y pantalones, uf! se hubiese visto guapísimo con todo, pero a esas alturas ya estaba confundida y pensaba que nada podría gustarle.

Me quedé con la comida, pero los ingredientes son demasiado difíciles de conseguir, con las niñas planeamos un almuerzo y cocinarle (todas juntas, nótese) algo que quiere comer hace mucho, pero que él ni si quiera se acuerda que lo quiere. Aún no doy con el ingrediente principal, esperemos que resulte no más pu’.

Que difícil, nunca había pensado tanto en un regalo y eso que mi hombre no es muy complicado, por último me miente y me dice que le gusta todo, sólo por hacerme sentir bien, pero quería algo especial.....

¿¿¿Y si en vez de todo esto le regalo mi corazón???

4 comentarios:

pablo minolta dijo...

El corazón, pero después del jueves porque si no vai a andar con las defensas bajas.

Cariños Sporty's.

J.C.Morgado dijo...

Lo que regales ....dalo con el corazón!!

Saludos
:)

Anónimo dijo...

Bárbara...no? juntar piezas es una de mis virtudes, solo espero que tanto pensar en sus regalos te haya servido de algo.
Yo una vez regalé mi corazón y me lo devolvieron pisoteado.

Un buen vino hubiese sido suficiente.

Anónimo dijo...

... y me regalaste mucho más que tu corazón, me acompañaste tal como quería, llenaste ese día, y el anterior y el que sigue, de millones de gestos y abrazos...
Fue una noche perfecta...