31 de agosto de 2006

de olores y recuerdos

Me gusta eso que tienen los olores, porque asocio cada olor con personas o situaciones, porque los olores me llevan a otro tiempo, a otros recuerdos. Hay días que ando más atenta a éstos, ayer fue uno de ellos y cada sensación que tuve fue agradable, los olores a veces prenden en el alma.

El olor a naranjas me recuerda a mi hermana, la más grande.
El olor a limón me lleva esos tiempos donde escalábamos un palto y nos sentábamos a ver como la vida pasaba.
El olor a una especial colonia de manzana, me aprieta la guata, me recuerda las apuradas duchas de este verano para llegar pronto a la cita.
El olor a manzanilla, me recuerda unas duchas más largas y su espalda mojada.
El olor a comino me hace sentir al lado de un brasero, calentando tortillas para untarlas en mantequilla.
El olor a guacamole, conmemora vacaciones y juntas con mis amigas.
La lluvia, el olor que deja a su paso más bien, me lleva a hacer de nuevo todo el camino de la casa al colegio, jugando mover los árboles para que no pesaran tanto con el agua acumulada.
Con el olor a pasto recién cortado, viajo de inmediato a “las frías mañanas en la facultad”, donde siempre era bueno una conversa antes de empezar el día.
El olor a fresas y a playa, me traen el abrazo de mi hijo, tal vez fueron los primeros olores distintos al típico olor a bebé.
El olor a café me lleva a la sensación de esos desayunos en la cama, o en la mesa, acompañados de huevos con jamón, mantequilla, mermelada, desayunos que ocurren cada fin de semana por cierto y que espero sigan ocurriendo por mucho tiempo más.

No hay comentarios.: